Últimamente la inteligencia artificial ha estado siendo tema de debate dentro de la comunidad científica y no han sido pocos los que se han pronunciado al respecto. Muchos hemos ya escuchado hablar de ella, sin embargo, no sabemos muy bien de qué va. Misteriosa; poderosa; peligrosa; no es de sorprender que la IA dé tanto de que hablar y cuente tanto con detractores como partidarios dentro de la misma comunidad científica y tecnológica.
Un peligro inminente
Los detractores de la IA aseguran que esta representa un peligro incluso para nuestra propia existencia en la tierra. Entre ellos se encuentra el célebre físico teórico Stephen Hawking, quien confiesa que el desarrollo de inteligencia artificial podría acabar significando el fin de la raza humana. El científico de origen británico nos alerta que si los sistemas artificiales llegasen a superar en inteligencia al ser humano estos podrían rediseñarse a sí mismos y tomar control sobre nosotros. “Los seres humanos, que están limitados por la evolución biológica no podrían competir y quedarían suprimidos” nos dice Hawking.
Otra gran personalidad que comparte preocupación al respecto es Elon Musk, CEO de Tesla Motors y co-fundador de SpaceX y Paypal. En una charla dada en el MIT confesó su preocupación sobre el tema y analizó que con la inteligencia artificial estamos convocando al demonio. “Sabes todas estas historias dónde hay un hombre con un pentagrama y agua bendita, pensando que seguro podrá controlar al demonio, pero nunca funciona así” dijo Musk en una metáfora.
A pesar de la preocupación y del fatalismo que muestran algunos, existen también personas que depositan su confianza en el avance tecnológico que nos ofrece la inteligencia artificial. Entre estas personas está el presidente ejecutivo de Google, Eric Schmidt, quien piensa que el temor sobre la inteligencia artificial es equivocado y que la IA va a mejorar a la humanidad. Los partidarios de la Inteligencia Artificial argumentan que esta va a carecer de capacidades humanas tales como lo son la conciencia y la comprensión, elementos que precisamente impedirían que las máquinas tomasen control sobre nosotros y nos borrasen de la faz de la tierra.
¿Mucha ciencia ficción?
La verdad es que la Inteligencia Artificial actualmente está en etapas muy tempranas, y es común y sano desconfiar de ella. Este no es y tampoco será el primer avance científico que genere polémica, sin embargo, su desarrollo no se detendrá por ellas. Lo más probable es que el verdadero peligro que traiga la inteligencia artificial se dé por el uso inadecuado que nosotros podamos darle y no por la singularidad tecnológica que lleve a las maquinas a decidir destruirnos.
Actualmente compañías tales como IBM, Google y Apple trabajan arduamente en futuras aplicaciones de la IA que mejoren a positivo nuestra sociedad, ejecutando labores que actualmente resulten agotadoras y peligrosas para nosotros los humanos. ¿Quién sabe? Quizá las maquinas no sean tan malas después de todo y de quien debamos desconfiar es de las personas detrás de ella.
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